Cesar León
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15 John Cleland Cres
Florey, ACT 2615
Canberra – Australia
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Email: cesarleon3@hotmail.com
Canberra, 20 –X – 2008
Carta abierta para:
Gen /Jefe Raúl Isaías Baduel
Vía Internet
Gen/Jefe Raúl Isaías Baduel:
Con el debido respeto me dirijo a usted para manifestarle mi profunda consternación con los hechos acaecidos en días pasados en Maracay, Estado Aragua, durante un procedimiento realizado por parte de funcionarios de la D.I.M. para su detención.
En ese momento usted pidió y exigió la presencia de un Fiscal de Menores para darle protección o garantizarles la integridad física y mental (traumas psicológicos) a los menores pertenecientes a su familia.
Este pedimento no fue cumplido, no hubo en su detención ningún representante del Ministerio Publico ni mucho menos algún Fiscal de Menores aunque se le dijo que llegarían en breve y sin mediar mucho o al meno sin darle la oportunidad a que usted ejerciera sus derechos constitucionales fue detenido y llevado a la sede de los tribunales Militares en Caracas en donde permaneció detenido durante varias horas e impuesto de una citación para compadecer antes el Fiscal Militar que instruye un expediente en su contra por la presunta comisión de sustracción de bienes de las Fuerzas Armadas en su gestión al frente de la Comandancia General de Ejercito
Los diarios y los noticieros cubrieron esa noticia, se desplegó un gran centimetraje en las páginas de la prensa escrita nacional, muchos minutos en la radio y la TV para cubrir ese gran acontecimiento que estremeció a todos los venezolanos.
Tomando como base lo vivido por usted y su familia tengo algunos comentarios que hacer respecto a su actitud asumida en diferentes ocasiones en el pretérito no muy lejano:
Ya hace algunos años, exactamente el 30 de Marzo del 2004, cuando usted era aun Comandante de la 42 Brigada de Paracaidista en La Placera, Maracay, Estado Aragua, en el Estado Zulia, exactamente en el Fuerte Mara, se encontraban ochos soldados recluidos en la Sala Disciplinaria en donde dos de ellos murieron por causas de quemaduras severas: los dos soldados muertos respondían al los nombres de: Ángel Ciro Pedranez (20) y Orlando Jesús Bustamante (20). Ambos pertenecientes a la 105 Batallón de Ingenieros de Combate Carlos Soublette.
Luego de estar en reclusión a estos soldados les sucedió algo verdaderamente horrible; un oficial de planta se acerca a la sala disciplinaria y descarga sobre la humanidad de los ochos soldado parte del contenido de un Lanza-llamas (NAPALM), muriendo dos soldados por las gravísimas quemaduras que este oficial le produjo a ellos después de accionar el arma.
Lo extraño es que en sus declaraciones del día 13 de Mayo de ese año usted dice que “las FAN no pretenden ocultar lo ocurrido en el Fuerte Mara”. El Presidente de la Republica dijo en su programa Alo Presidente que ocho soldados resultaron con quemaduras leves después que ellos iniciaran el fuego.
Pero el diputado Pastor Heydra de Acción Democrática hace acusaciones argumentando que los ocho soldados fueron victimas de un ataque con un lanzallamas.
Yo le pregunto a usted: en donde estaba usted que nunca denuncio tal crimen? Porque no utilizó la amistad que tenia en ese momento con el Presidente Chávez para acelerar un proceso investigativo imparcial que arrojara el esclarecimiento de los hechos y la acusación penal contra el oficial criminal o los implicados en el hecho?
Porque no hubo un pronunciamiento de su parte siendo usted unos de los Oficiales Generales mas cercanos e influyente en la administración Chávez acerca de lo ocurrido?
Yo pienso que en ese momento usted estaba cuidando sus ascensos posteriores y las nuevas posiciones que usted estaba encubando y que se les ofrecería en su futuro dentro de las Fuerzas Armadas, como el ascenso a General de División y su nuevo cargo como Comandante General de Ejercito.
Estoy seguro que usted sopeso la opción entre dar una declaración que podía ser lacerarte para el gobierno, la institución armada, Presidente de la Republica o mantener el silencio cómplice para garantizar su ascenso sin obstáculo en su carrera dentro de Fuerzas Armadas aunque muy poco digna pero sin riesgo de enlodar sus ascensos y bienestar personal por culpa de unos reclutas y evito a toda costa el promover o iniciar una investigación en contra del oficial que habían realizado dicha matanza en retaliación contra los soldados por haber firmado en contra de Presidente de la Republica.
Solo las madres y los padres y algunos allegados lloraron a los soldados muertos, en esa oportunidad no hubo el clarín de la patria para callar el llanto de esas madres.
Se trato de manipular la información y lo que es peor se trato de mentir a la opinión publica sobre como habían sucedidos los hechos, aunque hubo un Fiscal Nacional y tres Fiscales locales del Ministerio Publico para atender el caso, ellos tuvieron cuartadas sus diligencias por el hermetismo de las FAN y el poco acceso a los lugares en donde sucedieron los hechos y la prohibición de permitir interrogatorios imparciales a los sobrevivientes para que contaran la verdad. Los Fiscales Militares tampoco actuaron pues estaban bajo la represión y las órdenes superiores y posiblemente bajo las órdenes y supervisión directa Presidencial para frenar la verdad verdadera y salvaguardar al oficial criminal o a los responsables del hecho en cuestión.
Pienso que en todos eso años que transcurrieron después del Golpe de Estado del 11 de Abril en donde usted y el Teniente Coronel Alfredo Castro Soteldo jugaron un papel muy relevante y protagónico en las negociaciones y rescate del Presidente Chávez, a partir de ese momento usted solo se dedico a cumplir a cabalidad las ordenes superiores como para no entrar en conflictos innecesarios con el Presidente Chávez, el Ministro de la Defensa el General García Carneiro y su sucesor el Almirante Maniglia y de es forma asegurar los Soles venideros, una actitud pasiva, minusválida, sumisa y complaciente, sólo mirando los intereses personales.
Como segundo punto y no por eso menos importante quiero comentarle lo que ya usted sabe y sabía antes de que ocurriera.
En una noche como cualquier otra, usted aun disfrutaba de su Comando en la 42 Brigada de Paracaidista y próximo a disfrutar de su segundo Sol en sus caponas y el venidero ejercicio en el cargo de Comandante General del Ejército.
Ya entrada la madrugada , cerca de las tres de la madrugada dos vehiculo, un automóvil de color verde y una camioneta de color negro no identificado, rompió el silencio de la noche con el traqueteo de varias sub-ametralladoras contra la casa de habitación del General González Gonzáles, el Servicios de Inteligencia del Ejercito sabían que el General González se encontraba en casa con su familia, su esposa junto a sus dos hijas menores de edad, después del ametrallamiento solo se escucho el llanto profundo de pánico de dos niñas y la madres de ellas con profunda angustia y el miedo aterrador se incorporo para darle protección a las niñas que se encontraban en las habitaciones contiguas a la de ellas y para comprobar su estado de salud de las niñas.
La palidez, el temblor de sus cuerpos, el no entender lo que pasaba, el génesis de los traumas que se aflorarían casi de inmediato en esa familia fue el resultado de esa intervención del Servicio de Inteligencia del Ejercito, al cabo de una hora sonó el teléfono de la casa de la familia González en donde una voz que nunca se identifico dijo que el atentado había sido realizado por oficiales e inclusive por el Director del Servicio de Inteligencia del Ejercito y que la intención era darle un sustito de parte del General García Carneiro al General González González.
Lo más doloroso es que usted lo sabía lo que en esa noche había sucedido con antelación; usted disfrutaba de la confianza total del Presidente Chávez y del General García Carneiro.
Después de comprobar el estado de salud de las niñas, los vecinos tocaron la puerta para dar su apoyo a la familia González y brindar todo tipo de ayuda y soporte.
Pero esa noche no llego la Fiscalía Publica y mucho menos un Fiscal de Menores, fue a los dos días cuando se apareció en su casa un Fiscal del Ministerio Publico y el General González tuvo la oportunidad de hacer la denuncia respectiva.
Parecía que todos ustedes, desde el Presidente Chávez hasta los oficiales del terror, estaban muy bien orquestados, nunca nadie por parte del Estado dio alguna declaración sobre lo ocurrido.
Solo se escucho el silencio cómplice de parte de todos ustedes, sin ningún tipo de vergüenza usted acepto su anhelado segundo y luego su tercer Sol que lo colocaba como cabeza visible de los atropellos y abusos del Presidente Chávez y de su horrible represión contra los más débiles disidentes a través del Ministerio de la Defensa.
Usted acepto la cartera de La Defensa sabiendo que ese cargo estaba lleno de lágrimas de inocentes, de niños traumados por la represión abusiva y brutal departe del régimen, por sangre derramada de algunos que murieron por solo ser disidentes del gobierno y en ese momento usted se hacia responsable de todo lo sucio que sucedía en la Institución Armada en contra de sus propios miembros, y la colectividad venezolana.
Le prometo General, no pasara mucho tiempo en donde yo lo vea a usted sentado en la Corte Internacional de la Haya por Crímenes de Lesa Humanidad, Buena suerte!!
Me atrevo a repetir las mismas palabras de Rey Juan Carlos le dijo a Chávez: Baduel, POR QUE NO TE CALLAS!!
General, continuar.
Cesar León
